FORMACIÓN Y CAMBIO DE ACTITUDES:

UN CUENTO PARA REFLEXIONAR.

Erase una ves un príncipe que vivía muy feliz en su reino rodeado de su familia y sus criados los que concedían todos los deseos al príncipe, un día conoció a una joven de la que se enamoró, paso el tiempo y ellos decidieron unirse en matrimonio, tuvieron la boda mas bonita y elegante del reino con su traje de príncipe y ella con el vestido lleno de brillantes, era una pareja muy feliz y sus padres estaban orgullosos de ellos querían ser abuelos rápidamente.

Con el paso del tiempo la joven simplemente no concebía al nuevo príncipe tanto deseado, sin embargo ellos disfrutaban de su vida, pasaban el tiempo en los alrededores del reino, viajaban a países lejanos, salían de compras, los artículos mas caros, tenían todos los lujos del mundo; así el día menos esperado la sorpresa mas esperada por todos estaban esperando bebe, la felicidad creció e hicieron un festín en los jardines del reino para anunciar el feliz acontecimiento. Pasaron los meses y el vientre de la feliz madre comenzaba a crecer, pero al cumplir los seis meses de gestación la joven comenzó a sentirse mal muy mal, la llegada del bebe se había adelantado, nació un niñito tan chiquito, tan chiquito que cabía a penas en una caja de cartón, los príncipes en su desesperación exclamaban ¿porque a nosotros?, se preguntaban por qué había pasado esto con ellos siendo los mas ricos del reino tanta riqueza no alcanzaba para asegurar la vida de su pequeño hijo, al mismo tiempo los padres reyes se habían quedado sin sus cosas de valor, las vendieron para darle el mejor de los tratamientos al pequeño, el reino estaba en crisis; una situación que logro confundir tanto a la pareja de príncipes, que cuando les entregaron al fin al bebe ya no tenían la misma emoción con la que lo esperaban; pensaban en que harían ahora si ya no tenían nada que darle a su hijo, ya no tenemos los lujos ni los bienes con los que contábamos. Vivieron un tiempo de carencias y sufrimiento por el cambio drástico de su forma de vida anterior a la que tenían hace tiempo; al ver al pequeño crecer, caminar y superar todas las deficiencias con las que un niño así puede tener, se dieron cuenta que lo mas valioso estaba ahí que no era el valor de las joyas, los autos, el palacio, los viajes ni todos los lujos que se daban lo que realmente vale en la vida, que hay otras cosas no materiales por las que hay que vivir como el amor, la comprensión, la humildad, el respeto y la confianza para poder tener una gran familia el cual representa el reino en el que los hijos pueden ser felices.

Así la pareja poco a poco y con la experiencia la cual les dejo un muy buen fruto que fue la forma de valorar la vida y que después de tener todo lo material a cambio de ello tienen algo mejor a sus hijo; que la vida les dio otra oportunidad una vez que lograron entender que la experiencia que en su momento fue desagradable sirvió para valorarse como seres humanos iguales a los demás, al  final los que antes eran príncipes dueños del reino obtuvieron un trabajo digno con el que esto pueden vivir modestamente valorando cada día dando lo mejor de ellos para ser felices por siempre.